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Hasta hace poco estaban apilados a un costado en la calle sin llamar la atención, y solo eran vistos como un montón de maderas viejas y ordinarias. Hoy son codiciados y se miran con otros ojos, como una futura mesa, un posible sillón o ¿por qué no? el alma de un jardín vertical.
Tal vez nunca antes te habías imaginado cargando en el auto un pallet para reciclar. Pero son muy versátiles y se les puede dar un montón de usos, con el plus de que se ayuda al medioambiente reciclando un material de desecho, que además ¡es gratis!
Antes de convertir el palet en un nuevo mueble para tu casa conviene que te calces un par de guantes de trabajo grueso para remover clavos y astillas y lavar la madera con un cepillo y una solución de agua y lavandina. Dejá secar todo un día y rociá con insecticida. A las 24 horas ya está tu palet listo para una nueva vida.
Hay distintas clases de palet según la carga que puedan soportar, con tablas más o menos separadas y tacos de apoyo de sección variable. Los mejores son los de madera compacta y con algunos usos, ya que tienen menos astillas o asperezas. ¡A menos que quieras ejercitar los brazos con la lija!
Una mesa rodante es súper práctica y le da un toque interesante a tu living. Si la vas a usar como mesa de café o para comer, es mejor conseguir un palet de tablas juntas o bien colocarle un vidrio. De otro modo, vas a tener que rescatar las cucharitas en el suelo cada dos por tres.
Solo hace falta apilar dos pallets, unirlos con tornillos para evitar accidentes, y fijarle cuatro ruedas. Podés decorarla con retazos de tela, pintar a tu gusto o hacer un découpage con servilletas de papel para lograr un resultado original como el que se ve en la imagen.
Para hacer un silla en
un abrir y cerrar de ojos, solo tenes que apilar dos o tres palets y tirarle
encima un colchón o almohadón alto de base rígida para empezar a leer al sol. También podes apelar a tus dotes de carpintero y armarte
una original silla con dos palets como la de la imagen. Si van a estar a la intemperie, protegelos con un barniz para deck.
Si bien nació para soportar cargas y nada más, ahora el palet puede tener una segunda vida y llenarse de sabiduría. ¿Qué te parece crear una linda repisa o biblioteca? Se logra con solo apilar tantos como espacio de guardado necesites. Para darle un lindo acabado pasales un barniz al agua para madera y un poco de cera, que ayudará a unificar los tonos si los palets son de distinta procedencia.
El palet tiene una forma ideal para colocarle pequeñas plantas y lograr un jardín vertical. O huerto personal con aromáticas como el que propone Pop Up para hacer platos increíbles en tu cocina. Antes de usarlo para este fin tenés que proteger la madera para que te dure lo más posible. Esto se logra dejando las plantas en macetas, pero si querés poner la tierra directamente dentro del palet tendrías que recubrir los estantes con plástico negro grueso, para que no los pudra la humedad. O aplicar un protector para maderas, que puede ser el mismo que se usa en los decks y muebles de jardín.
La fiebre del pallet llegó también a las zonas de trabajo, y podés aprovecharlos para fabricar tu propio escritorio. Para eso basta con combinar un palet amurado a la pared con una base de apoyo de tablas bien juntas. Esta base se puede sostener con cadenas y bisagras para que sea rebatible.
Siempre que vayas a elegir un palet para reciclar, descartá los que tengan mal olor y manchas de aceite o grasa. También los que presenten rastros de insectos como polillas de la madera, pulgas, larvas o termitas porque a la larga se echarán a perder, con el riesgo de infectar a las maderas de los otros muebles de tu casa.
Sin gastar casi nada, ya tenés montones de alternativas para renovar y amoblar tu casa.
