Los años pasan, cada vez compramos más objetos, y en un momento, nos damos cuenta que nos falta el espacio. Periódicamente, digamos que cada tres o cuatro años, se puede ver qué artículos quedaron anticuados, son incómodos, están pasados de moda o ni los usamos, y se les puede dar otro destino. ¿Cuál? Pues que sean vendidos en una feria de garaje.
Esta modalidad es muy común en Estados Unidos y los países nórdicos. Quizás por tantos años de crisis, en España no hay tanta costumbre, pero de a poco va arraigando, sobre todo en las grandes ciudades y entre la gente joven.
Pero una venta de garaje no es colocar los objetos en venta y esperar. Requiere de una planificación previa, la búsqueda de un espacio de venta, una buena campaña de comunicación, y tener en claro los precios de salida de los productos.
Y un punto importante: la venta de garaje no es para obtener un gran rédito económico, sino para renovar el mobiliario y los artículos de la casa.
El primer punto básico es tener en cuenta qué artículos saldrán a la venta. Se trata de ir, con una lista en la mano, recorriendo cada ambiente de la casa y apuntar qué puede ofrecerse. En lo posible, se trata de sacar a la venta objetos que estén en buen estado, a menos que aquellos que están dañados o no funcionan lo ofrezcamos a un precio casi de regalo.
Cabe tener en cuenta a aquellos artículos que le tengamos un cariño especial, pero que al final no le demos ninguna utilidad, y ocupan un espacio importante. Y tampoco es mala idea aprovechar la ocasión para renovar algunos muebles, y ofrecerlos al mejor postor.
Como decíamos, la idea no es hacerse rico, sino tener un sentido de comercio justo: hemos pagado un precio de mercado por ese artículo, y lo ofrecemos a un precio reducido, pero tampoco regalado. El precio también irá acorde al estado del producto, y si tenemos dudas, pues podemos consultar los diversos portales de Internet de venta de segunda mano para saber a cuánto se puede ofrecer. Y como último paso, cabría diseñar unas bonitas tarjetas o etiquetas que indiquen el precio.