Tema de la semana: terrazas espectaculares

María Bausán María Bausán
Wiegmann-Klinik, Berlin, Optigrün international AG Optigrün international AG Balcones y terrazas
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Llega el verano y el interiorismo se escapa de los espacios que le dieron nombre. El exterior es el protagonista: jardines, patios, piscinas, terrazas, balcones. ¿Quién quiere quedarse en casa pudiendo disfrutar del ambiente veraniego?

En homify hemos dejado que el verano se haga dueño de nuestro tema de la semana y por eso estas siete terrazas espectaculares son las protagonistas de este artículo. 

Pero ¿qué convierte una terraza cualquiera en un lugar digno de mención? 

1. Las vistas

Porthleven, LEIVARS LEIVARS Balcones y terrazas de estilo ecléctico

No importa lo pequeña o grande que sea nuestra terraza, si sus vistas son espectaculares ella también lo será. Este es un gran ejemplo. Tan pequeño que hay quién diría que más que terraza es un balcón. Sin embargo, las vistas son inmejorables: solo la inmensidad del mar nos da la bienvenida cuando nos apoyamos a la barandilla.

Por el contrario, una gran terraza puede verse arruinada por unas vistas espantosas: chimeneas de fábricas, un bosque de antenas parabólicas o una pared musgosa hacen descender muchos puestos el glamour de nuestra terraza.

2. El tamaño

Una terraza amplia siempre ofrece muchas posibilidades, ya que nos permite colocar mesas, tumbonas, y hasta juegos para los niños. Además también podemos cuidar el diseño y los detalles. En este ejemplo, diseñado por Eva Vidal, se ha recubierto el suelo con madera y se han colocado plantas, destacar la fuerza de las bungavillas, en puntos estratégicos, que dan una nota de color y embellecen el ambiente. 

3. La forma

Además de grande, tiene 70 m², esta terraza tiene una geometría diferente. Desde arriba asemeja más a la cubierta de un barco que al espacio exterior de un ático. Pero en efecto, es una terraza. Situada en Rockstock, al norte de Alemania, su forma no es casual. Se encuentra casi rodeada de agua, como si más que una casa, estuviéramos subidos en un barco. 

4. La comodidad

De nada sirve tener una enorme terraza si no la tenemos acondicionada bien. La comodidad es uno de los puntos más importantes a tener en cuenta a la hora de poder disfrutar como nos merecemos de nuestro pequeño paraíso doméstico. En esta terraza todo invita al relax, tanto las tumbonas, convenientemente colocadas al so, hasta la vaporosa mosquitera, así como la posibilidad de disfrutar del comedor interior como si en realidad estuviéramos fuera. 

5. La piscina

Las vistas de esta terraza ya la hacen de por sí espectacular. No todo el mundo tiene el privilegio de contemplar la torre de la giralda mientras se relaja después de una jornada de trabajo. Pero si además puedes hacerlo metido en esta apetecible piscina, entonces el lujo es absoluto. 

Por suerte, este lujo es compartido, ya que esta terraza no pertenece a ninguna casa particular, sino al hotel sevillano Emehotel, diseñado por Donaire arquitectos. 

6. La vegetación

Una terraza con plantas es una terraza con vida. Pero si, como en esta azotea, además de macetas uno se puede permitir el lujo de tener césped y árboles, entonces la terraza ha pasado a otro nivel: es casi un jardín. 

No todos los edificios están preparados para soportar el peso de un jardín en lo alto, pero si la construcción lo permite, llenar de plantas nuestra terraza es una opción ecológica, atractiva y muy relajante. 

7. La compañía

Pero llegados a este punto, no importa si nuestra terraza es grande o pequeña, cuadrada o redonda, tiene plantas o está desértica, es cómoda, tiene piscina o unas vistas espectaculares. Como todo en la vida, sea como sea nuestra terraza, siempre será mucho mejor si la compañía es buena. 

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