6 casas rústicas fuera de lo convencional

Armando Cerra Armando Cerra
PROTOTIPO DE VIVIENDA UNIFAMILIAR PREFABRICADA, CON JURGEN VAN WEERELD I KARIN GIESBERTS, DMP arquitectura DMP arquitectura Casas prefabricadas
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Se podría pensar que todas las fachadas rústicas son muy semejantes. Hechas de piedra, con un porche y cubiertas de teja. Sin embargo, no es así, por la propia idea de rústico, es decir, propio del campo. Y en cada campo, en cada tierra, hay un clima, unos materiales y unas tradiciones, por eso incluso en la arquitectura rural popular hay distintos tipos de fachadas de un lugar a otro. Si a eso se le suma la propia evolución de la arquitectura y las influencias venidas de aquí y de allá, el resultado es que hay muchas posibles variaciones a la hora de concebir una fachada rústica. 

1. Una vivienda rústica en un antiguo garaje

Al hablar de fachadas rústicas no solo hay que tener en cuenta las de las viviendas, también hay que incluir las de edificios anexos, que en un momento dado son transformados para otros usos. Por ejemplo, aquí vemos un viejo garaje o almacén cuyas posibilidades son enormes, como lugar para situar una cocina y crear una zona externa de recreo, y también es muy útil para reconvertirlo en casa de invitados. La transformación es  todo un acierto y su encanto basado en la piedra, la simetría y la geometría posee una estética de lo más atractiva y amable.

3. Una casita en la montaña

Dom Arquitectura reformaron esta casa rodeada de montañas. En ella hay una reinterpretación y modernización de la arquitectura popular de la zona, basada principalmente en el uso de la piedra como material constructivo. Sin embargo, hay una renovación muy clara y evidente. Por regla general, los edificios tradicionales de los ambientes montañosos no suelen tener muchos vanos por motivos climáticos. Pero aquí toda la fachada queda abierta por vidrios que conecta el interior con su entorno. Una solución impensable antaño, pero posible y válida ahora gracias a los modernos sistemas de calefacción.

2. Ambiente rústico en la campiña inglesa

Podemos pensar que una fachada rústica siempre ha de tener el aspecto de una gran casona, y claro no tiene porque ser así, para empezar porque no todas las casas rústicas tienen que ser enormes y señoriales. Es más pueden ser mucho más atractivas y cercanas otras más modestas. Aquí vemos un ejemplo. Una casa cuya fachada de piedra traduce toda la estructura del interior de la vivienda, con un cuerpo lateral de dos alturas para las habitaciones de dormitorio, otra ala donde estarán la cocina y los lavabos y un largo cuerpo central con el comedor y la sala de estar. La fachada en su austeridad, sobre todo transmite una sensación de hogar que invita a pasar.

4. Una casa rústica y de madera

Decíamos que las fachadas rústicas son fruto de la tradición, el clima y los materiales disponibles en las proximidades. Aquí vemos un ejemplo muy lejano, en Estados Unidos. Un rancho, secularmente construidos con madera como elemento principal. Largas tablas rectangulares en disposición vertical que poco a poco van creando todos los muros externos de la vivienda. Con ese material es lógico que se tienda a formas muy geométricas basadas en un gran cuerpo inferior rectangular y otro superior de menores dimensiones. Y la nota de dinamismo para animar tanto ángulo recto se la proporcionan las vertientes inclinadas de los tejados.

6. Rústica, prefabricada y ecológica

Nada puede haber en principio más contradictorio que la modernidad de una casa prefabricada frente a la tradición de una casa rural. Pero ambas ideas se pueden combinar en las creaciones actuales de este tipo de viviendas. Eso inspira esta casa modular con su fachada íntegramente realizada en madera.

5. Una casa en el campo que se abre al paisaje

Otra muestra de la arquitectura tradicional en las construcciones modernas. En este caso en los Países Bajos. De ahí esa vertiginosa inclinación del tejado para salvar las habituales lluvias de la zona. Un tejado que recuerda los materiales añejos  y completamente naturales, pero que sobre todo enmarcan la fachada lateral del edificio. Una fachada que no es la principal ya que allí no se encuentra la entrada, pero sin embargo es la protagonista de la construcción, ya que toda ella es un espectacular ventanal abierto al bosque que rodea la casa.

¿Cómo te imaginas la fachada de la casa rústica que algún día tendrás?

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