¿Qué es una remodelación? Es hacer un cambio de un espacio, que puede incluir la estructura del mismo o bien sólo la decoración o el diseño del interior. ¿Y qué es una restauración? Es modificar la estructura de algo para mejorarlo, un piso enmohecido o un techo con tijerales inseguros requieren de restauración, y una sala que se convertirá en comedor y necesita mayor luz requiere de una remodelación.Como ves, hay una diferencia entre remodelación arquitectónica y restauración.
¡Fácil!, ¿no? Claro, es fácil para los expertos: arquitectos y arquitectas que se especializan en remodelaciones y restauraciones con base en su experiencia. Lo que no es fácil es encontrar a aquellos que manejen este tipo de soluciones arquitectónicas. Hay despachos de arquitectura que se dedican únicamente al proyecto arquitectónico desde cero, otros que sólo se enfocan en la construcción, pero el tomar un espacio ya construido y moldearlo a las nuevas necesidades habitacionales ¡es otra cosa! Las expectativas son muy claras, pero el riesgo de encontrarse con mayores problemas que los que significa el proyecto en sí mismo, es bastante grande.
Hoy te hablaremos un poco sobre remodelaciones y restauraciones de casas y edificios en nuestro país, así como también de las diferencia entre remodelación y restauración, para que distingas si lo que necesitas en casa es una restauración, una remodelación ¡u otra casa definitvamente!
Todo encargo de remodelación necesita de un proyecto.
¿Qué es el proyecto de remodelación de casas?
El proceso de trabajo del proyecto de remodelación de casa habitación o edificios:
Una vez que se conozca el lugar a intervenir debe trabajarse en el proyecto:
¿Cuándo se necesita remodelar algún espacio en casa, o la casa completa?
Ejemplos de que tu casa necesita ser remodelada:
Si para bañarnos adecuadamente necesitamos sostener la ducha con un alambre, si debemos cruzar la cocina para pasar del vestíbulo a la sala o si la puerta del baño choca con la puerta de alguna recámara, es necesario modificar esos detalles: cambiar puertas, abrir un muro, cerrar otro, reubicar la sala, el comedor o la cocina…
Cuando un espacio o la casa completa deja de ser funcional, es necesario intervenir y modificarla.
Una restauración significa arreglar, rehabilitar o adecuar algún espacio o un elemento del espacio para volver a utilizarlo o bien para alargar el tiempo y calidad de vida.
Ejemplos de restauración de casas:
Una terraza abandonada, por ejemplo, es un lugar con mucho potencial para volverse a utilizar, pero si el pergolado no ha recibido mantenimiento en varios años y además el piso ya no es funcional o las dimensiones no son suficientes, esa terraza deberá restaurarse:
Remodelar o restaurar tu casa, tiene algunos beneficios:
1. Si se trata de alguna intervención arquitectónica, es decir, que tengas que demoler, construir o modificar alguna estructura, es necesario tramitar una licencia de construcción.
2. Debes identificar las dimensiones de la remodelación: si son menos de 60 metros cuadrados, la licencia es simple o menor, y no requieres de un proyecto ejecutivo, tan sólo un croquis y datos básicos como materiales a utilizar y sistema constructivo.
3. Si se trata de una construcción mayor a 60 metros cuadrados, necesitarás elaborar un proyecto ejecutivo y contar con las firmas del proyectista y del responsable de obra, para poder proceder, además de que en los dos casos debes cubrir el costo de la autorización. ¿Sabes cuándo se requiere permiso de construcción y cuando no? Te lo decimos aquí.
Al llevar a cabo la remodelación de un edificio o casa, existen riesgos que debes saber, por ejemplo:
1. Licencia de construcción: si no cuentas con licencia de construcción, los verificadores pueden suspender la obra y requerirte una multa.
2. Imprevistos: pueden surgir imprevistos no planeados en el proyecto, como que cierto muro destinado a derrumbarse resulta ser de carga y es imposible derribarlo, por lo que se debe modificar el proyecto para no poner en riesgo la vivienda.
3.No ver errores estructurales: no darse cuenta de errores estructurales y poner en riesgo la edificación original por modificar elementos estructurales importantes como columnas, muros de carga o trabes y cerramientos.
4. Presupuesto elevado: ¡que el presupuesto se dispare! Es muy común, pues a veces no prevenimos gastos extraordinarios, cambios en el proyecto o costo de materiales.
¡Anímate a restaurar y a remodelar! Te aseguramos que será la mejor opción para tu casa. Si seguirás habitando ahí junto a tu familia, el cambio será refrescante, inspirador y se sentirán como en una nueva casa, además de darle más valor a su vivienda. Y si se trata de un lugar nuevo para adaptarlo a nuevas necesidades ya sea para venta o renta, los beneficios que obtendrás serán mayores pues tu inversión también será mayor, podrás ofrecer un espacio seguro, protegido y de calidad.
Por todos lados, restaurar o remodelar tu casa es una inversión que vale la pena y que es necesaria para mantener tu casa en excelentes condiciones a pesar del paso del tiempo.