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En este libro de ideas vamos a hablar de cocinas modernas e ilustraremos cada punto con sensacionales diseños de cocinas de Erick Becerra Arquitecto. Este talentoso arquitecto se encuentra basado en Bogotá, no dejen de visitar su perfil.
La cocina siempre ha sido un espacio esencialmente activo y hoy en día el diseño que conlleva se hace mucho hincapié en la funcionalidad. Mientras que en el dormitorio o la sala predomina la pasividad, y la mayor parte del tiempo nos la pasamos sentados o acostados, en una cocina moderna necesitamos una distribución que nos permita movernos de acá para allá con comodidad y soltura. Requiere de espacio de guardado bien pensado porque necesitamos agrupar ciertos elementos para tenerlos a la mano mientras cocinamos y la hornilla o el horno están calientes. En la cocina tenemos que albergar electrodomésticos y aparatos grandes y variados que van desde la nevera al horno de microondas, pasando por las hornillas y el horno, la lavadora, el lavaplatos y la gama de los más pequeños, como licuadoras, tostadoras o cafeteras. También es aquí donde guardamos la comida, perecedera y la que dura más tiempo, pero también necesitamos espacio para la vajilla, la cubertería, la cristalería y la mantelería. En la cocina, pues se cocina, pero además hay que lavar y limpiar y todo lo que usamos aquí se ensucia en serio. Y por si fuera poco tenemos que pensar en suficiente superficie de trabajo, en un fregadero para lavar los platos y en comedor de diario o una isla, si tenemos el espacio.
Reiteramos, la cocina es un ambiente de muchísima complejidad. Con todo lo anterior en mente, acompáñennos a conocer estos diseños que de seguro les servirán de inspiración a muchos de nuestros lectores.
Como en todos los espacios, el diseño de las cocinas modernas se adaptará a las necesidades del cliente y al espacio con el que se cuenta para diagramar el plano. Hoy en día las más usadas son las cocinas modulares, que se arman justamente en módulos que ya vienen pre-armados, o en piezas que pueden ensamblarse allí mismo. En el diseño de cocinas, la distribución es vital y los arquitectos piensan cómo hacerle la vida más fácil a quien vivirá en este espacio teniendo en cuenta el flujo y movimiento, así como la ubicación más idónea de los electrodomésticos.
La cocina puede ser un recinto curiosamente flexible en cuanto a la cantidad de estilos que funcionan de maravilla cuando de diseñarla y decorarla se trata. Pueden ser minimalistas y modernas, rústicas o campestres, industriales, escandinavas y con toques vintage. No hay estilo que no funcione y la fusión de uno o más estilos con la impronta moderna suele resultar en espacios eclécticos e interesantísimos desde el punto de vista estético.
Las cocinas integrales, como su nombre lo indica, son las que se presentan en bloques que muestran en su totalidad una cara homogénea, lo cual les da un look general muy estilizado y moderno. La idea es que todos los gabinetes, muebles de cocina y artefactos se integren en la decoración, haciendo que la cocina se vea perfectamente uniforme.
El minimalismo es un estilo que siempre transmite mucha sofisticación, gracias a sus líneas depuradas y la profusa utilización del color blanco. Para llevarlo un paso más allá, podemos elegir superficies lisas y brillantes y mantener todo aparato, artefacto o adminículo de cocina fuera de la vista, evitando en lo posible cualquier tipo de contaminación visual.
La barra en la cocina es uno de los elementos más útiles y funcionales que existen, además de contribuir muy positivamente al diseño general de este espacio. Esta estructura suma alternativamente ligar de guardado, superficie de trabajo y comedor de diario.
La cocina en U es muy conveniente cuando el espacio destinado a este espacio tiene una forma más bien cuadrada. Lo importante de este tipo de distribución es aprovechar las paredes del piso al techo y dejar el medio despejado para poder movernos con absoluta libertad.
Por allá por los años 40, la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Illinois dio a conocer su teoría acerca del “triángulo de trabajo” dentro de la cocina. El triángulo de trabajo es la distancia que existe entre los tres puntos donde se realiza la mayor parte de las tareas relacionadas con la preparación de las comidas. Estos puntos son la cocina (hornillas y horno), la nevera y el fregadero y lo más eficiente es que se encuentren a una distancia más o menos equidistante, para optimizar el uso del espacio.
Otro proyecto de este arquitecto en el link: Renovación de un apartaestudio en Bogotá
