No todos nacemos sabiendo como dice el dicho, por lo cual siempre se aprende algo y es mas divertido el proceso. En cuestión de limpieza, no se trata solo de pasar un trapo y listo, también hay algunos secretos que conviene tenerlos en cuenta para que el trabajo sea más eficiente y nos ahorre tiempo.
Por eso, lo que te recomendamos es seguir estos consejos de antemano y evitar errores que luego se pagan más caro.
A diferencia de lo que muchos piensan, los vidrios no se lavan cuando hay sol y hace mucho calor, lo ideal es hacer esta tarea los días nublados para que cuando se sequen no queden marcas ni manchas.
Espera que se esconda el sol o asegúrate que ese día estará más fresco.
El primero de los errores más comunes es comenzar la limpieza desde abajo y luego continuar hacia arriba. Si haces eso, terminarás trabajando el doble porque una vez que sacudas el polvo de muebles volverás a ensuciar lo que ya limpiaste.
Cuando llega el momento de lavar la ropa, en el apuro y la mala gana de hacerlo, solemos equivocarnos y terminamos poniendo la de color y la blanca toda a la vez para después arrepentirnos y ya no encontrar soluciones.
Tomate el tiempo para separar lo que necesita ser clasificado y ganarás en paz.
Cada parte de la casa necesita algunos productos y útiles correctos para su higiene. Y es mejor respetarlo para que después no nos traiga dolores de cabeza innecesarios.
Por eso, es mejor tomarse un tiempo para asesorarse sobre el tema y después tener todo organizado.
A la hora de limpiar, nada más contraproducente que ir de prisa. Todo lleva su tiempo y se necesita paciencia en el proceso.
Por eso, te recomendamos que el día que te decidas a dedicarte a la higiene de tu morada, no esperes volar y terminar enseguida.
Subidos al tren del apuro, a veces perdemos de vista que hay partes de la casa a las que no le ponemos mucho esmero. Por eso, te sugerimos que cuando uses la aspiradora sepas aprovechar cada rincón y superficie para una limpieza más profunda.
La aspiradora también necesita sus mimos, no es solo cuestión de pasarla cada vez que necesitamos y después no ocuparnos de ella.
Tomate el tiempo para revisar los filtros o las bolsas donde se acumula el polvo y la suciedad.
Los expertos en limpieza tienen algunos trucos que es bueno saber para que la tarea sea más apropiada y eficiente. Lo que recomiendan es hacerlo en forma de s o z, nunca hacerlo horizontalmente o veritcalmente.
¿Será cuestión de probarlo, no?
El último error que también es muy común es el que cometemos al limpiar los aparatos electrónicos. Normalmente, pensamos que con un trapo mojado quedarán más limpios y brillantes.
Sin embargo, nada más errado. Solo un trapo seco, nunca húmedo, para quitar el polvo.