12 cosas que no le gustan a los invitados al visitar tu casa

Esto es algo que a todos nos ha sucedido: ir a una casa nueva y tener que preguntar, con un poco de pena, la ubicación del baño.  Evítale esta situación embarazosa a tus invitados, indicándoles la ubicación del cuarto de baño a la hora en que lleguen a tu casa.

No podemos culpar a los invitados de frustrarse al tocar el timbre y que este no funcione, teniendo que quedarse a la espera durante largos momentos hasta que alguien los oiga. Haz un lado la pereza y ponte en contacto con un profesional para que solucione esto a la brevedad posible.

Muchas veces las reuniones o eventos que se organizan en casa requieren quitarse los zapatos.  Siempre es bueno tener un lugar especial para guardar los zapatos de los invitados, para que ellos se sientan cómodos de que su calzado se encuentra protegido.

Tener toallas de mano no sólo mejora la estética de tu cuarto de baño, sino que también es una cuestión de cortesía para tus invitados. Estando en una casa que no se conoce, es poco agradable estar buscando una toalla para secarse.

Tenemos que admitir que todos somos curiosos al ir a una casa ajena. Trata de no guardar bien objetos y pertenencias que no quieres que tus invitados descubran, evitando así un momento embarazoso.

Tratándose sólo de una cena o convivencia entre amigos y familia, debes dejar a tus invitados ser libres, manteniendo las cosas un tanto informales. Un gran anfitrión no necesariamente es el que lleva la etiqueta al pie de la letra. Por supuesto, hay reglas básicas de educación que no deben ser olvidadas. Pero, a veces, también es importante mantener un nivel de relajación que deje a los huéspedes sentirse seguros y cómodos

Permitir que las huéspedes contribuyan y ayuden a la preparación de alimentos puede ayudar a romper el hielo y hacer que se sienten incluidos. De otra forma, se podrán sentir un tanto ignorados. Por mucho que te guste que tus invitados descansen y sólo disfruten de un buen momento, acepta la ayuda aunque sea para una pequeña cosa como llevar más sillas a la mesa o abrir el vino.

La distribución de los puestos en la mesa va de la mano con la familiaridad entre cada invitado y con la edad de los invitados. Los niños pueden tener una mesa más pequeña y separada de la mesa de los adultos. Si no tienes una mesa propia para esto, acomoda a los niños en uno de los extremos de la mesa pues son inquietos y pronto se levantarán para jugar. La persona que se encarga de la cena, es la que debe estar más cerca de la cocina. En relación a los adultos mayores, manténlos cómodos y sentados al pie de una cara familiar que los pueda ayudar en lo que necesitan.

Se puede tener un acérrimo interés por un tema de conversación o un cierto tipo de música, pero pedir la opinión de tus invitados puede hacer que todos disfruten al máximo de la velada. De igual forma, te recomendamos pensar dos veces antes de pedir opinión sobre temas intrincados.

Siempre es agradable tener un poco de música en las reuniones, pero te recomendamos crear una lista de reproducción que sea del gusto popular.  También te sugerimos que al momento de reproducir la música, lo hagas con un volumen bajo, lo que permitirá que se pueda conversar durante la reunión.

Tener un gran sentido del estilo puede crear envidia en sus invitados, sobre todo si cuentas con detalles de decoración de colección. Intenta no generar controversia con estos elementos.

Por último, el tener a nuestros huéspedes hacinados en un espacio pequeño, puede resultar muy incómodo para todos, por lo que te recomendamos que los invites a los espacios más confortables y abiertos de tu casa, para que puedan disfrutar al máximo de la convivencia. 

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