¡Cuidado! Evitemos el monóxido de carbono

Jerónimo Moretti Jerónimo Moretti
Casa Ilha Bela Márcio Kogan, BAMBU CARBONO ZERO BAMBU CARBONO ZERO 트로피컬 주택
Loading admin actions …

El monóxido de carbono es un enemigo silencio. Está presente en todos las casas y es un peligro que no se ve. Tampoco se puede oler ni saborear, pero es mortal. 

El monóxido de carbono entra al organismo a través de los pulmones y es transportado por todo el cuerpo a través de la sangre. De esa manera, impide que la sangre transporte el oxigeno a los tejidos del cuerpo. Y, como todos sabemos, el oxigeno es esencial para el funcionamiento del corazón y del cerebro.

Casi todas las familias están expuestas al alto riesgo de envenenamiento con monóxido de carbono, que se puede producir al quemar petróleo de lámparas, aceite, gas natural y madera. 

Preocupante, ¿no? Pero a no desesperar: el monóxido de carbono sólo es un problema si los aparatos y los equipos en nuestro hogar no funcionan bien. Las piezas gastadas y la ventilación incorrecta puede causar un envenenamiento, y por eso es importante estar atento a estos sencillos tips que daremos a continuación.

Sí, el monóxido de carbono es un peligro serio, pero lo bueno es que, con un poco de atención, es fácilmente evitable. 

Evitar generadores eléctricos

homify 모던스타일 주택

Es alto el riesgo de intoxicación con monóxido de carbono debido al uso de generadores de electricidad a gas, así que lo primero es tener cuidado con estos aparatos.

Por eso, ante la necesidad de contar con algún suministro temporal de energía eléctrica se recomienda no usarlos nunca en áreas cerradas como sótanos o habitaciones, darles de unos cuantos metros de espacio alrededor, conectarlos directamente a la caja de fusibles, apagarlos y dejarlos que enfríen para recargarlos con combustible, y leer atentamente las instrucciones del fabricante.

También se recomienda colocar alarmas que funcionen con baterías para detectar el monóxido de carbono. Pero todavía más importante es revisar las baterías con frecuencia y cambiarlas cuando sea necesario. Recordemos que un pequeño descuido puede ser fatal.

Las parrillas en lugares cerrados no son una buena idea

A muchos les gusta el sabor de un buen asado, reunirse alrededor del fuego, juntarse con amigos y familiares… pero a veces no tenemos el espacio para montar una parrilla y, más que nada en la ciudad, se suelen construir en lugares cerrados. ¡Cuidado con eso!

Los expertos recomiendo nunca usar una parrilla de carbón o un asador dentro de la casa o en el garaje. Utilizar una parrilla en un espacio cerrado puede provocar una acumulación de monóxido de carbono tóxico que puede ser mortal.

En caso de tener una parrilla de interior, debemos ventilar bien el ambiente cuando prendemos el fuego. 

No usar el horno para calentar un ambiente

En épocas de frío, mucha gente usa el horno para calentar su casa sin conocer el grave riesgo que involucra hacerlo. 

El horno de la cocina (o las hornallas) no están diseñados para calentar el ambiente por un simple motivo: desprenden grandes cantidades de monóxido de carbono y no hay manera de darnos cuenta si el fuego se apagó y estamos sufriendo una intoxicación. 

Utilicemos calefactores, el calor del aire acondicionado, o una simple mantita, pero nunca jamás el horno de la cocina.

Las chimeneas son un riesgo

Son hermosas, pero sin el cuidado adecuado también son mortales. Nos referimos a las chimeneas, que puede matar en solo media hora. Sí, media hora le alcanza al monóxido de carbono para convertirse en un asesino silencioso.

Para que estos sucede, las chimeneas tienen que estar en mal estado por suciedad, obstrucción o acumulación de residuos, y además producirse una mala combustión en un espacio cerrado sin ventilación y que se origine tal cantidad de monóxido de carbono que, al respirarse durante un tiempo, se produzca un fallo cardiovascular que provoque la muerte. 

Por algo, las intoxicaciones por monóxido de carbono son accidentes frecuentes en invierno.

¿Cómo se genera el monóxido de carbono? Por una mala combustión que se produce cuando falta oxígeno. Esto ocurre, por ejemplo, en una chimenea con residuos. Si las llamas son amarillas, es un indicador de que este gas está en el ambiente. 

Revisar siempre los sistemas de calefacción

La calefacción hogareña es un problema, en especial para las viviendas de bajos recursos. 

Por eso, los especialistas recomiendan que las habitaciones no estén cerradas herméticamente  y que puedan ser aireadas. Tampoco hay que  dormir con artefactos a gas o combustible líquido encendidos en un dormitorio. Y por supuesto controlar el estado de las estufas antes de ponerlas en funcionamiento.

Es importantísimo revisar antes de comenzar la temporada de frío todos los artefactos de calefacción, incluidos calefones y termotanques, por personal profesional y matriculado. Y lo segundo es tener siempre una ventilación en los ambientes donde haya calefacción. 

Recordemos por enésima vez: es fundamental mantener la circulación del aire.

Siempre son útiles los detectores de monóxido de carbono

Un detector de monóxido de carbono es un aparato que, como su nombre lo indica, tiene la función de verificar cuáles son los niveles de este gas en nuestra casa.

La ventaja de estos aparatos es saber si el ambiente puede ser proclive o no a tener altos niveles de monóxido, con lo que a la vez se verifica la calidad del aire que respiramos.

El dispositivo trabaja de manera simple: cuando hay un aumento peligroso de monóxido de carbono en el aire, se dispara una alarma (similar a las de los detectores de humo) con lo que sabremos que el aire está contaminado.

Existen varios tipos de estos dispositivos, desde el más simple que sólo dispara una alarma hasta los que tienen una conexión con los servicios de emergencia.

¿Suena exagerado? Puede ser, pero no lo es para nada. Si tenemos la chance de comprar uno de estos detectores, tendremos una preocupación menos.

Conocer los síntomas

A pesar de ser conocido como el asesino silencioso, el monóxido de carbono deja algunos síntomas en nuestro cuerpo que, si estamos atentos, podremos detectar a tiempo. 

Algunos de los síntomas más comunes de la intoxicación son dolor de cabeza, mareo, debilidad, náuseas y vómitos, latidos del corazón rápidos, falta de aliento, convulsiones, dolor del pecho, paro cardíaco, pérdida de audición, visión borrosa, desorientación, pérdida del conocimiento o coma, fallo respiratorio, etcétera.

Los síntomas de la intoxicación por monóxido de carbono pueden parecerse a otras condiciones o problemas médicos, incluida la gripe o la intoxicación por alimentos. Así que no es cuestión de volverse paranoico, sino simplemente de tomar las precauciones necesarias y consultar con un médico en caso de duda.

건축/인테리어 전문가를 찾고 계시나요 ? 연락처를 남겨 주시면 적합한 전문가를 찾을 수 있도록 도와 드리겠습니다.
연락처를 남겨 주시면 적합한 전문가를 찾을 수 있도록 도와 드리겠습니다.

추천 기사