En un paraje desértico… un oasis rústico y moderno

La casa se sitúa en un paisaje desértico. Rodeada de montañas, la vivienda trata de mimetizarse con los colores naturales que la rodean. Es por eso que el marrón se convierte en uno de los favoritos.

La casa, cuya estructura ofrece un grandioso juego de volúmenes y formas, se desarrolla en dos plantas. Abajo se distribuyen las áreas sociales y privadas y arriba se reserva por un cuarto en suite.

Por fuera la vivienda es sencilla. Un pórtico en la planta baja genera múltiples terrazas. En la planta alta se repite esa lógica. Desde ellas se puede aprovechar las increíbles vistas hacia el paisaje.

En esta casa existe una combinación de diferentes materiales. Piedra, cemento y madera son grandes aliados y los vemos vistiendo casi toda la fachada de la vivienda.

La piedra juega un rol principal en algunos muros de la vivienda. La madera es otra protagonista. No sólo está presente en las aberturas; también forma parte de las distintas pérgolas que se forman en el pórtico de la planta baja y en las terrazas que se asoman desde el primer piso. 

En imagen podemos ver el plano de la vivienda. Las áreas sociales, en la planta baja, se desarrollan en el ala derecha de la casa y se comunican con la zona de la piscina.  Comedor, sala y cocina se integran en el mismo espacio.

En el ala izquierda se ubican dos cuartos  que se conectan con la zona del jardín y tres baños. Hacia el fondo de la vivienda, junto a  la escalera,  existe un tercer dormitorio. Toda la construcción, como mencionamos, cuenta con pequeñas terrazas. Esos elementos, además de asegurar una conexión con el exterior, bañan de luz y ventilación natural casa uno de los espacios.

La planta alta se destina a un dormitorio suite y cuenta con diferentes terrazas aire libre. Desde ellas se puede disfrutar de las bellísimas vistas hacia el paisaje. 

Las terrazas han sido cubiertas con delicadas pérgolas diseñadas en madera. Este elemento estructural, además de sumar un valor estético a la fachada, crea rincones funcionales que suman espacios a la vivienda.

Nos despedimos de este recorrido deteniéndonos, una vez más, en el frente de la casa. Esta vivienda, de diseño moderno con acento rústico, no estaría completa sin una piscina que sirva como oasis para combatir las altas temperaturas en verano. 

El juego de sombras que baña la fachada es asombroso. ¿Y el mobiliario elegido para complementar la piscina? realmente, ¡estupendo!

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-¡Una casa familiar espectacular!